Confinados


Pistas para sobrevivir a las pestes.

Ayer mientras oía el discurso de Pedro Sanchez en el congreso de los diputados me llamó la atención un argumento de los que utilizó: se refirió a la falacia retrospectiva que es más o menos la idea de que una vez que sucede algo es muy fácil criticar a los que ya advirtieron o aconsejaron otras medidas . El «ya te lo dije yo, pero no me hicisteis caso» es una forma de pensamiento contrafactual que es muy robusto cuando las cosas ya han sucedido, es verdad pero Pedro Sanchez eludía así su negligencia al haber banalizado desde el primer momento las medidas que nunca se tomaron para intentar minimizar el contagio cuando ya teníamos muy cerca el caso de Italia. Y se seguía hablando de «como una gripe», algo que ha dado lugar a la emergencia de un neologismo en las redes: el sologripismo.

Por no hacer, ni siquiera se hizo un recuento de necesidades que en caso de urgencia deberían haberse puesto a disposición del publico en general o de los sanitarios y policías en particular. Me refiero al extraño caso de las mascarillas y jabones desinfectantes. ¿Por qué nadie pensó en esas necesidades de primer orden? ¿Y si alguien lo pensó por qué nadie les hizo caso? ¿Eran escandalizadores profesionales?

Pero en realidad todos los gobiernos funcionan así de mal pues la democracia es el gobierno de los torpes. Es mentira que los ciudadanos seamos la prioridad en estas crisis sanitarias. La prioridad es la economía. Siempre. Solo así se explica que el alcalde de Valencia mantuviera todo el despliegue pre-fallero con mascletàs, paellas multitudinarias y «cridàs» como todos los años, convocando a gran cantidad de publico que -ajeno a lo que se venia encima- acudieron a la cita. Lo mismo sucedió con el futbol valenciano que ajeno a las circunstancias permitieron la ida y vuelta del partido contra el Atalanta de Bergamo, la zona 0 del contagio en Italia. Mucho se ha hablado de la permisividad con el 8-M o con la cita de Abascal en Vistaalegre pero la cantidad de eventos multitudinarios permitidos en España mientras el virus hacia de las suyas es demasiado largo para evocarlo.

Lo cierto es que aunque Pedro Sanchez despejara balones hubo una negligencia no solo por parte de su gobierno sino de alcaldes, presidentes regionales y otros, por no hablar de la información diaria y contradictoria de Fernando Simón, el señor del jersey.

Un ejercicio contrafactual positivo sería este: ¿Qué hubiera sucedido si se hubieran suspendido los vuelos con Italia, se hubieran suspendido las manifestaciones, se hubiera bloqueado Madrid impidiendo los viajes a la costa mediterránea o de vascongados huyendo a Cantabria de cientos de personas en busca de su segunda vivienda como en el Decamerón.

No lo sabemos, pero lo cierto es que esta lógica del bloqueo se llevó a cabo en Igualada y en Haro y parece que se trató de una estrategia con éxito. Lo que nos permite especular que bloquear Madrid o Vitoria hubiera sido una buena idea, tanto por carretera como por ferrocarril, demasiada gente ha entrado y salido de la capital de España y siguen haciéndolo, también en Vascongadas.

A cambio de no bloquear Madrid (que es el principal foco) se ha metido en casa a toda la población. Estamos confinados y de eso va este post: del confinamiento.

En realidad la estrategia epidemiológica va dirigida a evitar el bloqueo del sistema sanitario y no tanto a impedir muertes, pues bloquear el sistema sanitario sería un desastre de características imprevisibles. ¿Qué estará sucediendo ya con las otras enfermedades que se atienden en los Hospitales? ¿Seguirán tratándose los infartos, los ictus, las fracturas, las urgencias quirúrgicas, etc? No cabe duda de que si pero precisamente uno de los efectos de la epidemia es que todas estas patologías del día a día han pasado a un segundo plano. ¿Habrá cierta dejadez y negligencia en detectar a estos enfermos tal y como se venia haciendo? ¿O habrá un abandono o retraso en los diagnósticos por otras razones ajenas al coronavirus?

De esta opinión es John Ionannidis: habrá un cierto numero de fallecidos que morirán por otras causas y cuya causa de defunción será atribuida al coronavirus sin hablar de la comorbilidad con otros virus o bacterias. Ionnanidis es uno de los epidemiólogos que más saben sobre el coronavirus y su familia y recientemente ha escrito un articulo muy interesante que os dejo aquí. Esto no significa que Ionnanidis tenga razón, en realidad si hay tantas opiniones sobre este asunto es porque nos falta información. No significa que se nos oculte información, es mucho más simple: ignorancia. Por ejemplo, no sabemos si el confinamiento logrará aplanar la curva de contagios y por tanto aliviar la presión sanitaria en los Hospitales. NI si conseguirá disminuir las muertes. Tampoco sabemos si esa curva seguirá una progresión geométrica o se detendrá. No lo sabemos. Tampoco sabemos si dejará inmunidad de grupo, si desaparecerá con el calor o si volverá en otoño.

El gato y el elefante.-

Hubo una vez un elefante al que un gato comenzó a arañar en una pata, para librarse de él el elefante comenzó a correr sin caer en la cuenta de que había un precipicio cerca, y acabó precipitándose en él.

Se trata la metáfora que utiliza Ionnanidis para explicar el viejo adagio de que el remedio puede ser peor que la enfermedad, o de que algunos remedios no aseguran el fin de la enfermedad sino que añaden nuevos efectos secundarios con los que no contábamos. Para que los políticos digan que no los advertimos me propongo ahora -aunque no soy epidemiólogo sino psiquiatra- comenzar a predecir ciertos efectos colaterales que por desgracia ya estamos viendo a pesar de que llevamos solo 6 días de confinamiento.

Y ahora estamos en plena fase de sobreactuación. Porque:

El confinamiento no puede durar mucho tiempo sin que se produzcan nuevos efectos colaterales.

Ioannidis enciende la alerta: “Una de las líneas de fondo es que no sabemos cuánto tiempo se pueden mantener las medidas de distanciamiento social y los confinamientos en el domicilio sin mayores consecuencias para la economía, la sociedad y la salud mental. Pueden surgir evoluciones impredecibles, incluyendo crisis financiera, disturbios, conflictos civiles, guerra y un colapso del tejido social. Como mínimo, necesitamos datos de prevalencia e incidencia imparciales para la carga infecciosa en evolución para guiar la toma de decisiones”.

Se me ocurren alguno de estos efectos colaterales sin mencionar los económicos que van a ser devastadores, me refiero a los otros, esos intangibles:

1.- Las residencias de ancianos y personal penitenciario.-

Si hay algo que sabemos es que la población más vulnerable son los ancianos y es obvio decir que los ancianos ingresados en Residencias no están confinados sino sometidos a un régimen de exposición entre unos y otros, junto con el personal tratante y las visitas. Dicho de otro modo, los ancianos no han sido confinados sino que viven en unas condiciones de socialización similares a las de los presos, un grupo demográfico que presenta el mismo riesgo que ellos.

De hecho no deja de ser paradigmático que las mayores cifras de defunciones se hayan dado en las residencias de ancianos. Madrid, Tomelloso y Torrent.

2.- Los niños.-

Los niños pequeños son una población poco vulnerable al virus y probablemente sean un reservorio para anticuerpos del mismo (si crea anticuerpos que tampoco lo sabemos) pero lo cierto es que el efecto del confinamiento en los niños puede ser letal para ellos. Mi nieto de 2 años sabe que algo está pasando porque le hemos cambiado su rutina y no hace más que nombrar a sus amigos de guardería, se encuentra tristón, no entiende porque no puede bajar a la calle, dar un paseo o tomar el sol y el aire. Esta restricción en los niños afecta sobre todo a su socialización y es muy probable que lo sientan como una perdida. nadie ha pensado en ellos a la hora de planificar estas medidas extraordinarias y no acabo de comprender porque no pueden bajar al jardín o ir al parque pero si los perros (una de las decisiones mas kafkianas de nuestro gobierno). Dirán que porque pueden contagiar a otros, pero en mi opinión va a ser inevitable ahora o más tarde que los niños se contagien en las guarderías o en los colegios y contagien a los adultos, debe ser por eso que Boris Johnson aun no ha cerrado las guarderías ni los colegios aunque es probable que lo haga a ciegas debido al incremento de casos en UK.

Boris Johnson optó en principio por la estrategia punk  o darwiniana aunque parece que ya ha desistido y ha optado por la opción sensata, es decir por la sobreactuación.

En cualquier caso nadie sabe si mantener las guarderías y colegios de primaria abiertos tendría o no alguna influencia en los contagios y la letalidad del virus. Simplemente se sobreactua sin tener toda la información.

Andar solo por la calle.-

Tampoco entiendo que se haya prohibido deambular por la calle aun andando solo, o bien correr o ir en bicicleta. Hacer algo de deporte es un buen protector contra los efectos negativos del confinamiento y no encuentro ninguna razón para prohibirlo. Hay que recordar que el vector del contagio es de persona a persona y que por tanto y más allá de prohibir los eventos sociales o las acumulaciones de personas en lugares cerrados el resto de medidas no tienen demasiado sentido. Al fin y al cabo los supermercados son un lugar tan peligroso para el contagio como el bar al que acudimos a tomarnos un café.

Ir en coche pero solo una persona es otra estúpida idea puesto que convivo con mi esposa en casa pero se me prohibe ir con mi esposa con el coche para desplazarme a comprar enseres. Ahora vamos de uno en uno a sabiendas de que es absurdo.

Los enfermos mentales y los dependientes.-

¿Alguien ha pensado qué hacer con los enfermos mentales de hoy y los que emergerán en el futuro a causa de este confinamiento? Los efectos sobre la salud mental de la desocialización y del miedo, la soledad y el desamparo son tan notables como el mismo riesgo de infección y aun más. Aqui teneis un buen articulo sobre el impacto del coronavirus en la población general pero no habla de los pacientes mentales graves, una población muy susceptible de la que nadie habla.

Con respecto a los dependientes nadie habla de que la mayoría de ellos dependen de cuidadores a los que les resulta difícil acceder a sus domicilios. Todos tienen miedo a ser detenidos o multados pro la policía. ¿Cuantos dependientes han dejado de ser asistidos por el personal adecuado durante este periodo (ya van 5 dias) de aislamiento?

Españoles apresados en otros países.-

¿Existe ya algún plan para repatriar a los españoles que han quedado atrapados en otros países o se les va a dejar a su suerte? Incluso niños en Canada han quedado atrapados en sus viajes de intercambio cultural.

El cierre radical de fronteras en mi opinión es otro ejemplo de sobreactuación: no se cierra Madrid pero se cierra la frontera de Galicia, o Extremadura con Portugal a pesar de tener muy pocos casos. Solo las fronteras aeronáuticas con China, Irán o Italia debieron ser cerradas a su tiempo y permanecer cerradas mientras dure la crisis sanitaria.

En conclusión.-

Mi pueblo es un pueblo de la provincia de Castellón de unos 5000 habitantes, no hay un solo caso y está todo cerrado. Todos están confinados. ¿Tiene esto algún sentido?

Mi opinión es que el confinamiento de la población en sus casas se ha llevado a cabo para no cerrar las fronteras terrestres de Madrid, el verdadero foco de la expansión del virus y porque se supone que es la mejor forma de salvaguardar el sistema de salud pero esto no está demostrado. ¿Qué pasará si el sistema colapsa a pesar del confinamiento?

Y en cualquier caso ¿Cuanto tiempo se podrá mantener tal confinamiento sin dar paso a una revuelta en las calles, saqueos, manifestaciones o simplemente transgresiones de la prohibición?

¿No hubiera sido mejor obligar a llevar mascarilla o guantes para salir de casa evitando en cualquier caso las reuniones de personas?. ¿No deberíamos poder llevar a los niños al parque?

Ah, es que no había mascarillas para todos.

Dice Jesus Maestro: El verdadero talento no consiste en diseñar la intención del virus sino la de gestionar sus consecuencias. Lo que significa:

Que poco importa el origen del virus, si es de diseño o natural, si procede del murciélago o del pescado, si tenemos la misma cepa de China u otra, de si USA o algún poder secreto quiere cambiarnos la vida para implantarnos un chip para espiarnos mejor, de si la vacuna procederá de China, Alemania o USA. Lo que importa es cómo manejamos la situación una vez que se declarara y lo cierto es que por el momento nuestro gobierno ha cometido, más que errores, negligencias y que ahora en su sobreactuación tiene otro problema. Porque:

Una vez todos confinados qué harán para sacarnos de casa.

3 comentarios en “Confinados

  1. Muy de acuerdo con el artículo. No tiene sentido que no podamos bajar a la calle, pasear, correr, ir en bicicleta de forma individual o pasear o ir en coche con nuestro familiar o co,Panero de piso com el que estamos conviviendo. Aunque imagino que estas medidas tan rígidas pueden servir para ver el balance de contagiados en 15 días. La ausencia de prevención de material sobre todo para los sanitarios, es denunciable, sobre todo si hay bajas de médicos y demas sanitarios por contagio. Supongo que no será la última pandemia y la próxima nos pille más prevenidos.

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  2. Evidentemente la idea o creencia a que unos hechos podían haber sido diferentes a como han sucedido, es en si misma una de tantas anomalías que nos acompañan, junto a la idea o creencia en la fantasía de existir separados del mundo bajo un supuesto libre albedrio acotado que postula estar desacondicionada en la toma de decisiones. El sesgo por tanto que modifica el recuerdo de la opinión previa, se encuentra enmarcado en algo bastante mas banal como es la imagen, que es la diana de esas inferencias. En si todas estas ideas/creencias son un virus de índole psicológico que se auto replica en el ámbito de la persona siempre preocupada por su reputación y, su miedo a no tener el control; como si lo hubiera tenido alguna vez.
    Aquí encontramos que lo importante es el sentido ultimo que mueve al individuo, esta acotado a dos únicas posibilidades, o lo principal es la reputación/control o, lo es el «Conócete a ti mismo». La ilusión del tiempo es un actor fundamental; su ilusa existencia que edifica a la persona en el devenir sin caer en la cuenta que el pasado como el futuro no son entidades objetivas, si no imaginación objetivada, desvía la atención de lo único importante que es afrontar el aquí y el ahora, a la vez que nos ofrece ese conocimiento esencial sobre nuestras respuestas únicas posibles; por que en vivo y en directo fueron las decisiones en su momento y, lo mismo será cuando el supuesto futuro toque atracar en este puerto del instante. Mi conclusión final es que el materialismo igual que el idealismo siempre asentados en supuestos sobre el génesis de todas las cosas en el tiempo, han muerto, lo que ocurre que todavía no se han enterado. No, hasta que se den cuenta de que a todo fenómeno sensible X siempre le acompaña un perceptor Y; sin X o sin Y no hay ecuación que valga, punto débil y ciego del materialismo y, eso pasa por deconstruir a la persona que vive en el tiempo. El virus del covid deja las cosas bastante claras, solo la cruda realidad acaba defenestrando, a los que viven en el tiempo, a los antivacunas, los terraplanistas, los locos lúdicos, idealistas e idealismos, los conspiradores de la paranoia, a la políticos que ya no habla de lo de siempre, al materialismo filosófico; confinados con la realidad solo nos queda afrontarla para conocernos o, evadirnos como un punto ciego mirando afuera o en el tiempo de que las cosas podrían haber sido diferentes y, en la esperanza de que lo serán; viviendo como los profetas del tiempo.

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