De Robert Trivers ya he hablado en algún lugar de este blog pero le vuelvo a citar en relación con este libro que preside este post por sus aportaciones sobre engaño y autoengaño. Trivers es un conocido biólogo y sociobiólogo estadounidense que mantiene una hipótesis evolucionista muy incomoda. Sostiene que el engaño y el autoengaño son estrategias evolutivas que permiten a los seres vivos obtener ventajas en la competencia de recursos y reproducción. El engaño se refiere a la manipulación de la información que se presenta a los demás mientras que el autoengaño implica la manipulación de la información que se presenta a sí mismo. Ambos procesos pueden tener efectos perjudiciales o beneficiosos dependiendo del contexto y la situación en que se utilicen.
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Trastornos del deseo estético (II)
Siguiendo mi anterior post me propongo ahora una ampliación de otros trastornos del deseo estético y recordaré que en cada uno de estos cuadrantes voy a integrar tanto las condiciones (no patológicas o maneras de ser), los trastornos propiamente dichos que no implican patología por sí mismos pero están muy cerca de ella y las enfermedades propiamente dichas que implican patología. En este caso la patología pivotaría alrededor de la idea de la belleza.
El empuje hacia la mujer
«El empuje hacia la mujer» (la puissance a la femme) es una conceptualización que hizo Jacques Lacan y que opuso a la conceptualización de Freud sobre la «homosexualidad latente» que fue la explicación que Freud hizo del caso del profesor Schreber.
Enfermar por desbordamiento
Narciso y Eco
Hace algún tiempo escribí un post que titulé «histeria desbordada» donde presentaba el caso de una muchacha que presentó un cuadro grave de conversión donde se pueden apreciar a las claras la yatrogenia médica sobre el cuerpo de aquella muchacha. Apuntaba allí -a propósito del narcisismo- que contrariamente a lo que la gente cree, el narcisista no es una persona que se quiera mucho a sí misma, sino un arreglo pulsional de emergencia para protegerse de la falta de amor, de cuidado o de interés por nuestros primeros cuidadores. El narcisismo primario nos viene de serie y ya describí en este post a qué nos referimos con esta palabra.